El fabricante británico de camas Savoir ha lanzado esta semana al mercado la 'Royal Bed', un colchón que cuesta 175.000 dólares (unos 135.555 euros) la pieza, vendiéndola, según reza la etiqueta, como una "inversión" en el buen dormir.
Las camas son de edición limitada. Se han fabricado sólo 60 y en cada una se han invertido 700 horas de trabajo. Además, están hechas con crin de caballo de América Latina, puro cachemir de Mongolia y una seda especial traída desde un lugar remoto.
Este lujo, inspirado en la ropa de cama de los siglos 17 y 18, está especialmente diseñado para complacer a un rey.
El gerente general de Savoir, Alistair Hughes, ha asegurado que gastar tanto dinero en esta cama vale la pena, porque garantiza un despertar feliz cada mañana.
El tamaño del colchón puede personalizarse según las necesidades del usuario, tanto en tamaño como con el bordado favorito de los consumidores.
Por otra parte, tienen una esperanza de vida de unos 25 años (aunque habría que reemplazar los resortes internos cada 5 ó 7 años, con un coste de reposición de entre 1.000 y 5.000 dólares).
Haciendo un cálculo rapidito, si el colchón puede tener 25 años de uso y cuesta 175.000 dólares, el comprador gastará por cada noche de sueño alrededor de 20 dólares.
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