No es ningún secreto que Tokyo es una de las ciudades más pobladas del mundo. Y también la que ofrece los apartamentos más pequeños. Un programa de noticias japonés ha emitido recientemente un reportaje sobre este problema, poniendo de manifiesto lo ridículo que resulta que la gente pague rentas enormes por vivir en casas del tamaño de un ataúd.
Sólo observando las fotos de los apartamentos del distrito Shibuya uno siente claustrofobia. Y, sin embargo, hay personas dispuestas a dejarse más de 55.000 yuanes al mes (algo más de 450 euros) para vivir en ellos. La mayoría son profesionales jóvenes que pasan casi todo su tiempo en el trabajo y al aire libre, utilizando estos alojamientos minúsculos sólo para dormir. Aún así, el hecho de que alguien pague un alquiler tan alto con este tipo de condiciones de vida es desconcertante. Aparte de la evidente falta de espacio, estos llamados 'geki-sema' o 'casas compartidas" se apilan unos encima de otros, y muchos ni siquiera tienen ventanas.
El equipo del programa entrevistó a dos inquilinos de 'sema-geki', un joven empresario y una aspirante a actriz que vivían en menos de 3 metros cuadrados, donde disponían del sitio justo para una televisión pequeña, almohadas, una manta y algo de ropa. Dijeron que optaron por este tipo de hogar porque no tienen mucho dinero.
Teniendo en cuenta los precios el problema de densidad demográfica de Tokyo, podría entenderse que alguien pague 100 euros al mes por uno de estos apartamentos, pero 500 parece un poco excesivo. Claro que el precio incluye la calefacción y la electricidad, aunque el baño es compartido.
Sólo asegúrese de recordar estas fotos la próxima vez que se queje de que su casa se le queda pequeña.
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