Un restaurante en el centro de la localidad de Harbin, en China, emplea a 20 robots en lugar de personas para cocinar, servir y entretener a sus invitados. El restaurante abrió sus puertas en junio de 2012 y desde entonces se ha convertido un lugar de moda en la ciudad.
Los artilugios miden entre 1,5 y 2 metros de altura y pueden mostrar 10 expresiones faciales diferentes. Pero el personal no es barato - cada uno cuesta de 200.000 a 300.000 yuanes (entre 24.000 y 36.000 euros) además de los 5 millones de yuanes (600.000 euros) invertidos en el propio restaurante.
Fuente: http://www.amusingplanet.com